lunes, 20 de mayo de 2013

EL NUEVO BETI-ONA CADETE

Finalizada la presente temporada, nuestro equipo ha comenzado a preparar a sus chicos para la próxima. Se han unido los dos equipos cadetes para organizar el bloque que compondrá el grupo del año que viene. 

Este sábado hemos jugado un partido contra el S.A.N.S.E, equipo recién ascendido a la categoría cadete de honor. Como no podía ser de otra forma dado el rival, S.A.N.S.E (Somos Amigos No Somos Enemigos), el partido fue amistoso. 

 





No, ni nos besamos ni bailamos. La verdad es que el partido estuvo entretenido, con igualdad en el marcador, muchísimos cambios y ganas  de hacer buen fútbol. Al final, mucha lluvia, empate a uno y todos contentos.

Sin la tensión de la competición parece que nuestros chicos juegan más tranquilos y mejor. Os aconsejo pensar que lo que hacéis es:




viernes, 17 de mayo de 2013

HAY UN MUNDO DESPUÉS DEL FÚTBOL


Ya no hay fútbol. Pero acabo de leer un artículo que da que pensar, y que os resumo a continuación. La metáfora del cerdo es posible aplicarla a cualquier actividad, ya sea laboral o deportiva.

CÓMO CAZAR Y AMANSAR CERDOS
Para cazar cerdos, comienzo por buscar un claro sin maleza, donde tiro unos puñados de maíz en el suelo. Cuando los cerdos lo descubren, van a comer todos los días, y solo tengo que reponerles diariamente la ración.

Una vez acostumbrados los cerdos, construyo una cerca en uno de los lados del claro y sigo poniéndoles alimento. Durante unos días van a desconfiar, pero terminan por volver. Entonces hago otra cerca formando una “”L”" con la anterior, y les sigo poniendo comida hasta que de nuevo dejan de desconfiar y regresan a comer.

Y así sucesivamente, hasta que casi cierro los cuatro lados y solo dejo una abertura para el portón. Para entonces los cerdos se han acostumbrado al maíz fácil, le han perdido el miedo a las cercas y entran y salen con naturalidad.

Otro día coloco el portón, lo dejo abierto y sigo poniendo maíz, hasta que encuentro los cerdos comiendo, entonces cierro la puerta. Al principio empiezan a correr en círculos como locos, pero ya están sometidos. Muy pronto se tranquilizan y vuelven al alimento fácil, ya que se olvidaron de buscarlo por si mismos, y aceptan la esclavitud.

Nosotros, los "cerdos", debemos darnos cuenta de que los gobernantes que dan limosnas y subvenciones en lugar fomentar el trabajo, proceden de la misma manera que yo con los cerdos.

Nos tiran migajas de maíz gratis disfrazado de programas de ayuda, subvenciones y planes sociales, mientras el grueso del dinero lo convierten en empleo público para cargos políticos, jubilaciones millonarias para esos políticos, sueldos para liberados y asesores, dinero para los sindicatos y partidos políticos, sobornos electorales, etc...

Poco a poco, migaja a migaja, nos recortan derechos y nos machacan a impuestos, para sufragar sus estúpidos gastos. Pero a pesar de todo, muchos no nos damos cuenta de que no existe la comida gratis, es necesario el esfuerzo, y no es posible que alguien preste un servicio más barato y satisfactorio que el que uno mismo se hace.

“¡Sigamos así, sin más, y que Dios nos ayude cuando nos cierren el portón!”