Importante y ansiada victoria la conseguida este sábado en Behobia. El partido se desarrolló bajo una molesta lluvia, que nos acompaña desde hace semanas y que caló los huesos de los pocos habitantes de la grada, además de deslucir un disputado partido. Tal era el tiempo que acompañó el encuentro, que cuando nos acercábamos a ver el partido solamente una persona ocupaba la húmeda grada. Una vez comenzó el partido el número de espectadores se disparó hasta llegar a ocho o nueve.
Comenzamos marcando nosotros. Eso fue la clave de un encuentro que además del tiempo, terminó empañado por la dudosa actuación del imparcial que no debió permitir el disparatado comportamiento de algunos jugadores. Difícil cometido para una sola persona. Tras los goles, las discusiones y con lluvia incesante, nos fuimos al descanso con un esperanzador 1-2, pero con un jugador menos y sin entrenador en el banquillo.
La segunda parte resultó más cómoda de lo esperado, a pesar de jugar con uno menos. El equipo rival no creó ocasiones claras y fuimos nosotros, tras un error de su defensa, quienes colocamos nuevamente el balón en su portería. Con el 1-3 no podíamos perder la ocasión de llevarnos los tres puntos, y aunque a falta de dos o tres minutos el Behobia consiguió un tanto que dio emoción al partido, no fue suficiente para arrebatarnos la primera victoria de esta fase.
En fin. Victoria, alegría y lluvia, mucha lluvia.
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